Nueva Xbox, el salto más grande de Microsoft

Si algo ha dejado claro Microsoft en los últimos años es que no piensa abandonar las consolas…. una nueva Xbox?

Pese a los rumores de que se centraría solo en el “juego en la nube”, la compañía de Redmond sigue preparando su nueva generación de Xbox, una máquina que promete ser más potente, más abierta y más conectada que nunca.

Aún no tiene nombre oficial se habla de “Project Magnus”, “Xbox Next” o “Xbox 2028”, pero las filtraciones, declaraciones y pequeñas pistas de sus ingenieros ya nos dejan ver el camino que está tomando el futuro del ecosistema Xbox.

Los planes de Microsoft apuntan a un lanzamiento entre 2027 y 2028, justo a la par de la futura PlayStation 6.

Phil Spencer, jefe de Xbox, ha confirmado que “la siguiente generación ya está en desarrollo y será la más ambiciosa que hayamos hecho”.

Esto encaja perfectamente con el ciclo natural de las consolas. Las Xbox Series X|S salieron en 2020, y con la vida útil habitual de unos 7-8 años, el calendario encaja para un estreno a finales de 2027.

Pero lo más interesante es que, según varias fuentes, la próxima Xbox no será solo una consola tradicional, sino parte de un ecosistema híbrido entre hardware local y tecnología en la nube.

Todo apunta a que Microsoft y AMD seguirán colaborando para crear un nuevo procesador personalizado, conocido internamente como “Magnus APU”.

Este chip combinaría CPU y GPU en una sola unidad, con un proceso de fabricación de 3 nanómetros, lo que se traduce en mayor potencia, menor consumo y menos calor.

Los rumores hablan de una potencia cercana a los 45 teraflops, lo que la situaría ligeramente por encima de la futura PS6 en capacidad bruta.
Esto le permitiría mover juegos en 4K nativo a 120 fps sin despeinarse, e incluso ofrecer 8K reales en algunos títulos de nueva generación.

Además, esta nueva arquitectura estaría pensada para aprovechar el juego por IA, es decir, integrar algoritmos que ayuden al motor gráfico, reduzcan el ruido de imagen, predigan movimientos o gestionen físicas complejas en tiempo real.

En resumen,más poder, menos tiempos de carga y gráficos que rozarán el fotorrealismo.

Si hay algo que Microsoft está impulsando en todos sus productos, es la inteligencia artificial, y la nueva Xbox no será la excepción.

La compañía planea integrar una IA local, capaz de optimizar automáticamente los gráficos o la tasa de cuadros según el tipo de juego, recomendar configuraciones ideales para cada televisor o monitor. Analizar tu estilo de juego y adaptar la dificultad, los controles o incluso la interfaz para hacer la experiencia más cómoda. Asistirte durante las partidas, explicándote misiones, estrategias o puntos que pasaste por alto.

En otras palabras, una Xbox que te conoce y se adapta a ti, no al revés.

Imagina jugar Elden Ring 2 y que la consola te sugiera rutas más seguras o consejos de combate personalizados, todo en tiempo real. O que te diga: “Parece que prefieres exploración antes que combate. ¿Quieres ajustar la dificultad de enemigos?”
Eso es el tipo de experiencia que Microsoft busca ofrecer.

Otra de las grandes apuestas es el juego en la nube, algo que Xbox lleva años perfeccionando con Game Pass y xCloud.

La nueva consola podría funcionar en modo híbrido, usando tanto la potencia local como los servidores en la nube para ejecutar juegos.

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Por ejemplo, un título exigente podría procesar las físicas o la iluminación en la nube, mientras la consola se encarga del renderizado y la entrada de controles.

Eso significaría menos límites técnicos y una calidad visual incluso superior a la que permite el hardware por sí solo.

Y sí, todo esto se integraría con Game Pass Ultimate, que seguiría siendo el centro del ecosistema Xbox.

Tu biblioteca digital, tus partidas guardadas y tus progresos viajarían contigo sin importar dónde juegues: en la consola, en PC o incluso desde el móvil.

Microsoft ha dejado caer que la nueva Xbox no estará cerrada a una sola tienda de juegos.
Eso significa que podrías comprar juegos desde la Microsoft Store, Steam o incluso Epic Games, todo dentro del mismo ecosistema.
Un paso enorme hacia la libertad del jugador.

Además, hay fuertes rumores de que la consola podría ser modular, permitiendo cambiar el lector de discos, ampliar almacenamiento fácilmente o incluso actualizar ciertas partes del hardware sin tener que comprar una consola nueva.
Imagina algo así como un PC compacto con alma de consola.

También se especula con la llegada de una versión portátil, parecida a una Steam Deck, llamada internamente “Xbox Stream+”, que funcionaría conectada a la nube y sincronizada con tu consola principal.

Una de las cosas que mejor hace Xbox es cuidar el legado de sus jugadores, y todo indica que eso continuará.

La nueva consola será retrocompatible con todas las generaciones anteriores, desde Xbox clásica hasta Xbox Series X|S.

Y no solo eso, los juegos antiguos podrían recibir mejoras automáticas gracias a la IA integrada.

Eso incluye resolución más alta, texturas mejoradas y tasas de fotogramas más estables sin que los desarrolladores tengan que tocar el código original.

Así que sí, tus clásicos favoritos como Halo 3, Fable II o Gears of War podrían revivir como nunca antes.

Microsoft quiere una consola que sea potente pero silenciosa, con un diseño más compacto y elegante que la Series X.

Se habla de un chasis cilíndrico con iluminación LED dinámica, un sistema de refrigeración líquido-vapor mejorado y materiales reciclados para hacerlo más sostenible.

El sistema operativo también se renovará.

La nueva interfaz, inspirada en Windows 12, tendrá integración directa con Copilot, el asistente de IA de Microsoft.

Podrás pedirle cosas por voz como:

“Abre mi partida de Starfield y cambia la dificultad a modo explorador.”
O incluso:
“Descarga el último Forza y muéstrame cuántos amigos están conectados.”

Y sí, el mando también evolucionará con una vibración háptica más precisa, gatillos adaptativos mejorados y una respuesta táctil inspirada en el DualSense de PlayStation, pero con el toque Xbox.

Todo indica que la próxima Xbox saldrá a finales de 2027, con un precio de lanzamiento cercano a los 599 €.

Microsoft estaría preparando dos modelos. Uno base, completamente digital. Otro “Pro”, con lector de discos y almacenamiento ampliado.

El anuncio oficial podría llegar a mediados de 2026, probablemente en un gran evento de Xbox Showcase.

La nueva Xbox será mucho más que una simple sucesora, será el comienzo de una nueva era para el ecosistema Microsoft.
Más potencia, IA integrada, compatibilidad universal, diseño modular y libertad para jugar desde cualquier parte.

Y aunque todavía falten algunos años para verla en acción, está claro que el futuro del gaming se va a jugar entre dos gigantes: la PS6 y la nueva Xbox.

Pero si Microsoft cumple lo que promete, puede que estemos ante la consola más completa, flexible y avanzada jamás creada.

¿Mucho humo? Ya veremos por parte de Microsoft. Un saludo y gracias por leer en esta comunidad.

Alejandro Costilla Ferreres

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